"No dejamos de jugar porque envejecemos,
sino que envejecemos porque dejamos de jugar"
Anónimo
Uno de los factores que más inciden en el
estrés negativo ( existe el estrés positivo del que escribiré en otro articulo)
es la falta de tiempo libre o “recreo” para poder dedicarlo a nosotros mismos,
estamos en una sociedad de “humanos hacedores” y demasiado poco humanos,
tenemos una agenda tan llena, que incluso, no nos da de si la pagina y tenemos
que escribir en los márgenes; eso mantenido en el tiempo nos crea una
frustración que desemboca en una mala leche, ataques de ansiedad y depresión,
no dejando paso al optimismo, el humor y mucho menos a la risa; pensemos por un
momento que cuando nosotros no estemos en este mundo, la agenda se seguirá
llenando y otra persona la seguirá cumpliendo, y como diría mi admirada
Mafalda..."lo primero que hay que hacer es lo importante y no lo urgente". Pensémoslo
seriamente un momento, sabían que hay un insecto asiático de cuyo nombre no
puedo acordarme y que solo vive 59 segundos, démonos un poco mas de
tiempo...unas 12 horas, si solo tuviese de vida 12 horas a qué dedicaría ese
tiempo, que cantidad de cosas urgentes dejaría, por hacer las cosas realmente
importantes.